La formación del profesorado de Filosofía en la Enseñanza Media : ponencias del II Congreso Internacional del Milán
Ver/ Abrir
Nivel Educativo:
Tipo Documental:
Artículo de revistaEstadísticas:
Ver Estadísticas de usoMetadatos:
Mostrar el registro completo del ítemFecha:
1962Publicado en:
Enseñanza media. 1962, n. 99-102 ; p. 493-504Resumen:
La formación de los futuros profesores de filosofía se encuentra ante un dilema bien conocido ante las tentativas de vulgarización científica. La formación científica no produce pedagogos mientras que la preparación pedagógica corre el riesgo de comprometer el carácter científico del futuro trabajo del candidato. La preparación científica debe primar en la preparación pedagógica, las exigencias de la práctica vendrán más tarde. Después la preparación que discutimos dependerá también de los designios de los programas escolares respectivos y de los deberes especiales que ellos imponen a cada rama de la enseñanza. Es posible que los programas de un país exijan a sus alumnos estudios específicos, que estos en otros países solamente importe la cultura general. Las universidades tendrán que darse cuenta de lo que ofrecen a los futuros educadores en el curso y los ejercicios correspondientes. Quién busca en todas partes reconciliar los extremos, los países de Europa se distinguen claramente bastante los unos de los otros en a quien concierne la importancia que ellos atribuyen a la primera o a la última tarea. En definitiva, es indispensable que los profesores de los liceos enseñen filosofía a sus alumnos con métodos modernos que les ayuden a situarse en este mundo y no vale unos conceptos básicos y rápidos, hay que llegar a la esencia de las verdades apriorísticas para que el alumno pueda aprehender a vivir sus experiencias y por ello, la filosofía debe darse en varios cursos.
La formación de los futuros profesores de filosofía se encuentra ante un dilema bien conocido ante las tentativas de vulgarización científica. La formación científica no produce pedagogos mientras que la preparación pedagógica corre el riesgo de comprometer el carácter científico del futuro trabajo del candidato. La preparación científica debe primar en la preparación pedagógica, las exigencias de la práctica vendrán más tarde. Después la preparación que discutimos dependerá también de los designios de los programas escolares respectivos y de los deberes especiales que ellos imponen a cada rama de la enseñanza. Es posible que los programas de un país exijan a sus alumnos estudios específicos, que estos en otros países solamente importe la cultura general. Las universidades tendrán que darse cuenta de lo que ofrecen a los futuros educadores en el curso y los ejercicios correspondientes. Quién busca en todas partes reconciliar los extremos, los países de Europa se distinguen claramente bastante los unos de los otros en a quien concierne la importancia que ellos atribuyen a la primera o a la última tarea. En definitiva, es indispensable que los profesores de los liceos enseñen filosofía a sus alumnos con métodos modernos que les ayuden a situarse en este mundo y no vale unos conceptos básicos y rápidos, hay que llegar a la esencia de las verdades apriorísticas para que el alumno pueda aprehender a vivir sus experiencias y por ello, la filosofía debe darse en varios cursos.
Leer menos