Las exigencias de extensión, coherencia y variedad en la formación y el perfeccionamiento del profesorado
Ver/ Abrir
Nivel Educativo:
Tipo Documental:
Artículo de revistaEstadísticas:
Ver Estadísticas de usoMetadatos:
Mostrar el registro completo del ítemAutor:
Fecha:
1987Publicado en:
Revista de educación. 1987, n. 284 ; p. 89-112Resumen:
Los organismos y los sistemas que sostienen esta cultura precisan mantener el equilibrio entre el pasado, el presente en ebullición y el enigma del futuro. Más tarde la llegada de la crisis económica ha ampliado el malestar de la escuela. Sin embargo, hasta hoy, las medidas de reforma o renovación de los sistemas escolares han ido pocas veces acompañados por acciones coherentes en el campo de la formación y el perfeccionamiento del profesorado. Pero, ante todo, múltiples barreras siguen separando tanto los niveles de enseñanza como las categorías de profesores y los tipos de formación que se les ofrecían. Así, la metodología de la enseñanza y los fenómenos del aprendizaje no han ocupado el puesto que se merecían. En este sentido existe un consenso global claro entre los diferentes responsables políticos, técnicos o sindicales y los expertos investigadores con la intención de definir actuaciones más realistas. Desde el final de la última guerra, muchos problemas, han afectado a los sistemas educativos. Paralelamente a la reconstrucción de Europa y a la descolonización del tercer mundo, hemos asistido a un ejemplar esfuerzo de desarrollo y de diversificación de las estructuras docentes y educativas. Primero asistimos a una explosión escolar, después universitaria. Pero, a pesar de medidas urgentes como construcción de edificios, etcétera, los resultados obtenidos no han podido satisfacer la expectativa de las familias y de los individuos. Así, se ha observado una crisis mundial de la educación desde los años 1967-1968..
Los organismos y los sistemas que sostienen esta cultura precisan mantener el equilibrio entre el pasado, el presente en ebullición y el enigma del futuro. Más tarde la llegada de la crisis económica ha ampliado el malestar de la escuela. Sin embargo, hasta hoy, las medidas de reforma o renovación de los sistemas escolares han ido pocas veces acompañados por acciones coherentes en el campo de la formación y el perfeccionamiento del profesorado. Pero, ante todo, múltiples barreras siguen separando tanto los niveles de enseñanza como las categorías de profesores y los tipos de formación que se les ofrecían. Así, la metodología de la enseñanza y los fenómenos del aprendizaje no han ocupado el puesto que se merecían. En este sentido existe un consenso global claro entre los diferentes responsables políticos, técnicos o sindicales y los expertos investigadores con la intención de definir actuaciones más realistas. Desde el final de la última guerra, muchos problemas, han afectado a los sistemas educativos. Paralelamente a la reconstrucción de Europa y a la descolonización del tercer mundo, hemos asistido a un ejemplar esfuerzo de desarrollo y de diversificación de las estructuras docentes y educativas. Primero asistimos a una explosión escolar, después universitaria. Pero, a pesar de medidas urgentes como construcción de edificios, etcétera, los resultados obtenidos no han podido satisfacer la expectativa de las familias y de los individuos. Así, se ha observado una crisis mundial de la educación desde los años 1967-1968..
Leer menos