Bigarren hezkuntzaren hastapenak Gipuzkoan : Donostiak garatutako prozesua
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Fecha:
2001Publicado en:
Tantak. 2001, n. 26, diciembre ; p. 31-59Resumen:
Hablar de la configuración de los estudios de Segunda Enseñanza en la provincia de Guipúzcoa, supone hacer referencia a una serie de puntos principales, entre los cuales sobresaldrá notablemente la villa de Vergara, puesto que es precisamente allí donde surgirá el establecimiento que ostenta el carácter oficial de los citados estudios. Desde el punto de vista del prestigio, tanto a nivel educativo como social, Vergara y Tolosa supondrán los principales referentes, mientras que la ciudad de San Sebastián quedará en un segundo plano. No debemos olvidar que Tolosa gozó de la categoría de capital de provincia hasta el año 1854. Aún y todo, dicha ciudad de San Sebastián, que aparecía adormecida desde comienzos de siglo, despertará progresivamente de su anterior letargo, convirtiéndose finalmente en capital de provincia. A medida que va avanzando a nivel de prestigio, mostrará también un firme deseo de realizar una firme apuesta por la consecución de unos estudios de calidad, acordes con la categoría mostrada por la propia ciudad. Aún y todo, si bien las intenciones de dicha ciudad serán totalmente defendibles, encontrarán ante sí un difícil camino sembrado de obstáculos.
Hablar de la configuración de los estudios de Segunda Enseñanza en la provincia de Guipúzcoa, supone hacer referencia a una serie de puntos principales, entre los cuales sobresaldrá notablemente la villa de Vergara, puesto que es precisamente allí donde surgirá el establecimiento que ostenta el carácter oficial de los citados estudios. Desde el punto de vista del prestigio, tanto a nivel educativo como social, Vergara y Tolosa supondrán los principales referentes, mientras que la ciudad de San Sebastián quedará en un segundo plano. No debemos olvidar que Tolosa gozó de la categoría de capital de provincia hasta el año 1854. Aún y todo, dicha ciudad de San Sebastián, que aparecía adormecida desde comienzos de siglo, despertará progresivamente de su anterior letargo, convirtiéndose finalmente en capital de provincia. A medida que va avanzando a nivel de prestigio, mostrará también un firme deseo de realizar una firme apuesta por la consecución de unos estudios de calidad, acordes con la categoría mostrada por la propia ciudad. Aún y todo, si bien las intenciones de dicha ciudad serán totalmente defendibles, encontrarán ante sí un difícil camino sembrado de obstáculos.
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