El papel de la educación emancipadora en la teoría social de Antonio Negri y Michael Hardt
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2023Publicado en:
Aportes de la filosofía al campo educativo. Madrid, cop. 2023 ; p. 31-49Resumen:
Se analiza el papel de la educación en el marco general de la teoría social de Negri y Hardt en su propuesta de una democracia radical. Esta se apoya en un concepto de educación que concibe la acción educativa como una práctica de emancipación individual y colectiva orientada hacia la construcción de formas de vida en común. Por un lado, esta acción educativa se concibe como parte de un todo más amplio donde no solo se considera el sistema educativo como el único proveedor de educación, pues existe la coeducación entre iguales o la autoeducación, concebida como un proceso sin fin para la evolución personal de cada cual. Por otro lado, se explica que el nuevo concepto de comunidad política se basa en dos supuestos básicos: el papel fundamental de los individuos, unidos en redes creadas a partir de intereses comunes, como participantes activos en la construcción del mundo social; y la primacía del poder constituyente ante el poder constituido. Finalmente, se destacan tres problemas de esta teoría social en relación con la existencia de una ilusión fundacional, con una falta de motivación y con un supuesto de armonía. Es posible afirmar que la democracia radical y absoluta descrita y teorizada por Negri y Hardt se apoya en unas premisas orientadas a la posibilidad de garantizar la igualdad de oportunidades, y la existencia de espacios de encuentro entre iguales para que se construyan relaciones significativas capaces de dar lugar a una comunidad política que proyecta su futuro en común. La coeducación y la autoeducación son dos principios fundamentales de la teoría crítica de Negri y Hardt. A partir del proyecto político de Negri y Hardt se desprenden por tanto las bases de toda una teoría de la formación emancipadora.
Se analiza el papel de la educación en el marco general de la teoría social de Negri y Hardt en su propuesta de una democracia radical. Esta se apoya en un concepto de educación que concibe la acción educativa como una práctica de emancipación individual y colectiva orientada hacia la construcción de formas de vida en común. Por un lado, esta acción educativa se concibe como parte de un todo más amplio donde no solo se considera el sistema educativo como el único proveedor de educación, pues existe la coeducación entre iguales o la autoeducación, concebida como un proceso sin fin para la evolución personal de cada cual. Por otro lado, se explica que el nuevo concepto de comunidad política se basa en dos supuestos básicos: el papel fundamental de los individuos, unidos en redes creadas a partir de intereses comunes, como participantes activos en la construcción del mundo social; y la primacía del poder constituyente ante el poder constituido. Finalmente, se destacan tres problemas de esta teoría social en relación con la existencia de una ilusión fundacional, con una falta de motivación y con un supuesto de armonía. Es posible afirmar que la democracia radical y absoluta descrita y teorizada por Negri y Hardt se apoya en unas premisas orientadas a la posibilidad de garantizar la igualdad de oportunidades, y la existencia de espacios de encuentro entre iguales para que se construyan relaciones significativas capaces de dar lugar a una comunidad política que proyecta su futuro en común. La coeducación y la autoeducación son dos principios fundamentales de la teoría crítica de Negri y Hardt. A partir del proyecto político de Negri y Hardt se desprenden por tanto las bases de toda una teoría de la formación emancipadora.
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