Buenas prácticas docentes y tutoriales en el ámbito universitario : la visión del docente

Abstract

Se pretende definir las buenas prácticas docentes y tutoriales en el contexto universitario, así como las pautas necesarias con el fin de alcanzarlas, a través de la percepción del profesorado reconocido como excelente por la Universidad de Jaén. Por ello, las tres dimensiones de estudio son: concepto de buenas prácticas, buenas prácticas docentes y buenas prácticas en tutoría. Se sigue un enfoque de investigación cualitativo, basado en una muestra de 57 profesores de todas las facultades de la Universidad de Jaén (España). Se emplean dos técnicas de recogida de datos: el grupo de discusión, que trata de recoger información desde los diferentes puntos de vista de los participantes; y la entrevista semiestructurada, para recabar la información de forma individual y personal. Para el análisis se forma un grupo de trabajo de cuatro miembros que establecen subcategorías en base a la lectura sincrónica de las transcripciones. Los resultados muestran que el profesorado coincide en delimitar el concepto de buenas prácticas en docencia y tutoría universitaria a partir de las actuaciones desarrolladas en el ámbito académico (dominio de la materia y conocimiento didáctico para garantizar un aprendizaje significativo), y la necesidad de habilidades sociales para relacionarse con el alumnado (empatía, respeto, confianza/cercanía, implicación en el interés por el alumnado y la docencia). Se identifican como buenas prácticas docentes: la coordinación entre docentes del mismo curso, la atención a la diversidad del alumnado, el desarrollo de estrategias de enseñanza-aprendizaje, organización y evaluación del proceso, la utilización de recursos didácticos tecnológicos y la implementación de metodologías activas para un aprendizaje significativo. Las buenas prácticas en tutoría se desarrollan en torno a la orientación académica, personal y profesional del alumnado, manifestando la importancia de resolver dudas de exámenes y adaptar las tutorías presenciales a los horarios del alumnado, así como atender al alumnado desde el ámbito personal y resolver sus inquietudes sobre su futuro laboral. Se concluye que la atención al alumnado es el eje central de las prácticas descritas, y se percibe que existe una dificultad en cuanto a separar las labores docentes y las tutoriales.