Entre la escuela y el mundo

Abstract

Se analiza la importancia de una escuela que valore el potencial de una relación intensa y continua con todo lo que se encuentra fuera de los centros educativos. Se reflexiona sobre la necesidad de introducir la vida en los itinerarios de aprendizaje que la escuela propone. Una escuela que no interactúe con el mundo y su entorno es una escuela que está fuera del espacio y del tiempo. La escuela debe aprovechar los estímulos que el mundo proporciona, ofreciendo a los estudiantes las oportunidades que sean necesarias para que se muevan por el mundo con confianza y competencia. Es por ello, que el objetivo perseguido es una escuela natural que se abra al mundo, que permita a los niños habitar contextos vivos y encontrar preguntas auténticas que estimulen el uso de estrategias múltiples, heurísticas y transversales. Además, una escuela abierta al mundo favorece la relación entre adultos y niños y, por tanto, favorece el aprendizaje de los niños basado en las relaciones interpersonales con personas de distintas edades.